El hinchazón y dolor de pies es algo muy habitual en las mujeres embarazadas. Cuanto más tiempo pasa y de más meses estás, más molestias se sufren, pero puedes aliviar este dolor.
Durante el embarazo se aumenta de peso y esto hace que se altere el centro de gravedad de la mujer, colocando la presión sobre las rodillas y los pies. Muchas veces se pueden debilitar los arcos de los pies, osea que se sufra de pies planos.
Esto hay que tratarlo para que después no tengas dolores más intensos.
Si quieres evitarlo lo primero que debes de hacer es utilizar zapatos cómodos que brinden un soporte extra a los arcos de los pies. Puedes utilizar zapatillas de gimnasia o plantillas especiales.
Otro de los problemas es el hinchazón o edema, que provoca problemas circulatorios por la presión del útero que está creciendo. Suele pasar al tercer trimestre de la gestación y no es causa de alarma para los médicos, a no ser que el hinchazón no afecte sólo a los pies y también te pase en manos y rostro. En este caso debes de ir inmediatamente al ginecólogo porque puede indicar la presencia de preeclampsia.
Consejos para aliviar las molestias de los pies hinchados:
- Pon los pies en alto todo el tiempo que puedas.
- No utilices medias ni calcetines que puedan cortar la circulación en tus piernas. Es decir, evita las medias de calcetín que aprietan o los calcetines de deporte gruesos que siempre dejan marca porque oprimen los pies.
- Habla con tu médico y consulta si puedes hacer ejercicios o caminar.
- Si tienes que hacer viajes largos procura parar y descansar para estirar las piernas.
- Cuida tu alimentación y come de manera equilibrada. Evita los excesos de sal y así no tendrás retenciones de líquido.
- Lo más importante, si no encuentras solución fácil a la hinchazón y dolor de pies consulta a tu médico, ya que si se han producido de manera normal, también se pueden aliviar con estos consejos simples, si no es así, debes de consultar con ginecólogo y así evitar otros problemas.
Durante el embarazo se aumenta de peso y esto hace que se altere el centro de gravedad de la mujer, colocando la presión sobre las rodillas y los pies. Muchas veces se pueden debilitar los arcos de los pies, osea que se sufra de pies planos.
Esto hay que tratarlo para que después no tengas dolores más intensos.
Si quieres evitarlo lo primero que debes de hacer es utilizar zapatos cómodos que brinden un soporte extra a los arcos de los pies. Puedes utilizar zapatillas de gimnasia o plantillas especiales.
Otro de los problemas es el hinchazón o edema, que provoca problemas circulatorios por la presión del útero que está creciendo. Suele pasar al tercer trimestre de la gestación y no es causa de alarma para los médicos, a no ser que el hinchazón no afecte sólo a los pies y también te pase en manos y rostro. En este caso debes de ir inmediatamente al ginecólogo porque puede indicar la presencia de preeclampsia.
Consejos para aliviar las molestias de los pies hinchados:
- Pon los pies en alto todo el tiempo que puedas.
- No utilices medias ni calcetines que puedan cortar la circulación en tus piernas. Es decir, evita las medias de calcetín que aprietan o los calcetines de deporte gruesos que siempre dejan marca porque oprimen los pies.
- Habla con tu médico y consulta si puedes hacer ejercicios o caminar.
- Si tienes que hacer viajes largos procura parar y descansar para estirar las piernas.
- Cuida tu alimentación y come de manera equilibrada. Evita los excesos de sal y así no tendrás retenciones de líquido.
- Lo más importante, si no encuentras solución fácil a la hinchazón y dolor de pies consulta a tu médico, ya que si se han producido de manera normal, también se pueden aliviar con estos consejos simples, si no es así, debes de consultar con ginecólogo y así evitar otros problemas.
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